EQUINOCCIO DE ARIES «LA RESTAURACIÓN DEL MAGO» part.II

A las puertas de inaugurar el gran periodo de los 3 grandes Festivales Conscientes y espirituales de este año, dejando atrás el frío invierno y su introspección íntima, el equinoccio de Aries, junto al descomunal empuje del eclipse y de la luna nueva, nos colocamos nuevamente frente a las «fuerzas de restauración», sus mágicas sincronías y sus fuertes corrientes kundalínicas.

La materia revitalizada por los fuegos eléctricos enviados y recibidos por todos los centros conscientes cósmicos que tienen el trabajo enfocado sobre el plano mental creativo, abre un periodo de alto ritmo vibracional destinado a explorar, consolidar o manifestar el sendero de la conciencia individual y su meta de Armonía absoluta con el Todo.

A través de la constelación de Aries la espiral de fuego del Espíritu nos empuja a la muerte de las inercias para la posterior resurrección del estado original , de la libertad de creación que sacude a todas las mentes del planeta , como eje, como causa primordial del progreso evolutivo, del firme y bello regreso al Uno.

La creciente radioactividad de las moléculas, que después del trabajo personal y la búsqueda reciben cada vez más inspiración de los senderos magnéticos del cosmos, nos envuelve con sus corredores transpersonales de energía, ofreciéndonos un excepcional periodo de progreso y consolidación hacia la acción creadora.

El eclipse abre su generosa sombra realizando una divina entrega a la luz de la conciencia única. La luna y el sol en su mágica conjunción (mente-comprensión) nos muestran una vía desnaturalizada de instintos, donde el sol del día y el sol de la noche, son el encuentro que posibilita la aurora.

La progresión creciente del fuego kundalini, que célula a célula y molécula a molécula reorganiza y retorna al origen de Amor toda conciencia y radiación de la misma, crea a nuestro alrededor un poderoso campo magnético, que gracias a  la creciente sensibilidad del hombre a las fuerzas invisibles con las que convive, convierte este periodo en un intercambio poderoso de principios, en un espacio único de sincronicidad, telepatía y crecientes estímulos destinados a consolidar el 6º sentido y sus movimientos de inteligencia intuitiva.

Navegando un espacio-tiempo sin precedentes ciertas fuerzas y poderes espirituales aguardan latentes el compromiso de la acción. Nuevos ideales universales permanecen en el aura del planeta, mientras un ejercito de implacable de voluntad espiritual, se cuela telepáticamente en las mentes y corazones de la humanidad.

Aries derrama su tendencia de experimentación creativa produciendo una primavera física y psicológica.

Tras los diferentes senderos internos, sus ciclos y mareas entre las luces y fuegos del ser, un aliento de nueva vida nos envuelve en la reconexión rítmica, regalándonos los escenarios necesarios, para reencontrar nuestro biorritmo natural inhalando y exhalando a través de todo el cosmos.

La demanda de un profundo conocimiento de las propias fuerzas en pos del conocimiento universal, nos empuja, sendero a sendero, ciclo a ciclo, experiencia tras experiencia a la capacitación del proceso constructivo de las ocultas leyes de la atracción, convirtiéndonos en el potencial eje de una unidad interna que ha de exteriorizar las fuerzas de Reconstrucción que actuarán promovidas por el Festival de Géminis.

A niveles micro-cósmicos este trimestre es una gran oportunidad consciente de evolución.

Más allá de las corrientes y energías que operan a través de las constelaciones y planetas, el ser humano avanza a pasos agigantados hacia la restauración de su propia divinidad y posterior emponderamiento.

Las brisas que nos acunaron y elevaron al gran contacto inspiracional de los portales 11-11, se convierten ahora en la tierra firme, donde el Genio Solar, o Mago blanco derrama el verdadero arte existencial de la vida.

Coordinando los diferentes estados psico-emocionales, nutriéndonos y radiando la comunión de los planos, cada vez con menos esfuerzos abandonamos inercias e instintos raciales descubriendo a cada paso, que cada una de nuestras pequeñas muertes es un firme progreso hacia la libertad.

Así la sutileza de la materia viene reformándose en nosotros a través de cada juicio que ya desterramos, de cada paso hacia la aceptación personal que damos, de cada amorosa mirada que destinamos a nuestros temibles monstruos, que una vez acariciados en las profundidades del pensamiento escondido, emergen poniendo a nuestra disposición sus propias fuerzas.

Latido a latido, respiración tras respiración las montañas rusas de nuestras diferentes y disociadas corrientes energéticas se concentran cada vez más en la pulsión única con un todo, ampliando nuestras capacidades cognictivas hacemos caer una y otra vez, un velo tras otro.

La alquimia que este fuerte encuentro de espejos y reflejos produce en todos los niveles del ser, reorienta la perspectiva y amplia el horizonte, poniendo a nuestra alcance las activaciones y transformaciones que a través de nuestras experiencias y conocimientos influyen también como proyección de manifestación futura, en todos los entes y realidades planetarias.

Activada la raíz cósmica, gracias al esfuerzo coordinado de meditadores y servidores de este tiempo en cualquiera de sus vertientes de acción enfocada y concentrada, la transformación y elevación de la materia, está preparada para llevarse a cabo, y todo lo pre-existente a este momento, entregado a la creación de un vibrante y reconstruido hogar.

El caos y la desorganización de planos personales y substancia ha sido sometido a la actividad amorosa y creadora de cada individuo que ha puesto un pie en el sendero de la evolución de acuario, y llega ahora el trascendental momento, de que lo eterno, lo absoluto y lo inmanifestado, genere las nuevas causas, que han de hacer girar la rueda kármica durante la era de acuario.

Traía la deriva su propia brújula,

traía el miedo su propio valor,

traían tus ojos mis mismos sueños

y mi voz…la comprensión.

 

Llega a ti, ve, y vence.

 

Namasté. Feliz equinoccio, Feliz restauración!

Bendita la danza de Visionarios y sus Almas.

Anabel.C.Huertas